La vida está llena de alegrías y tristezas. Desde cumpleaños felices y primeros amores hasta rupturas o distanciamientos con personas especiales, cada experiencia forma parte de un proceso de crecimiento que fortalece nuestro carácter para que sobrellevemos los retos que se presenten en el futuro.
Pero, sin duda, uno de los momentos más difíciles es la pérdida de un ser querido y el duelo que conlleva durante las siguientes semanas, meses o años. Esta fase de adaptación es natural ante la ausencia inesperada de una persona a la cual estábamos acostumbrados y tiene la finalidad de brindarnos desahogo frente a un cambio tan abrupto en nuestras vidas.
En otras palabras, el duelo es doloroso pero necesario para liberarnos de sentimientos como la conmoción, la tristeza, el enfado o la soledad. Gracias a este periodo de gestión emocional, le damos un nuevo sentido a la pérdida y nos regalamos la oportunidad de vivir plenamente otra vez.
¿Cómo es el proceso del duelo?
Como es de esperarse, el duelo no es un proceso lineal. Hay días de avances y retrocesos, momentos de paz y de aflicción que pueden interpretarse como tropiezos, pero en realidad nos van acercando a la recuperación de nuestra salud física y emocional.
Generalmente, se distinguen 5 etapas principales del duelo:
- Negación.
- Ira o enojo.
- Negociación.
- Depresión.
- Aceptación.
Sin embargo, cada persona lo vive de manera diferente conforme a su personalidad, entorno y experiencias.
¿Los cuidados paliativos ayudan al proceso de duelo?
Esta especialidad médica no solo alivia el dolor y mejora la calidad de vida de los pacientes con enfermedades potencialmente mortales, sino que facilita la aceptación de la pérdida por parte de familiares y amigos.
Cuando una persona recibe acompañamiento especializado:
- Tiene un mayor control sobre el sufrimiento físico o emocional.
- Le da un nuevo significado a la pérdida, visualizando la muerte como un proceso natural y propio de la vida.
- Reafirma el valor de sus emociones y las de sus personas cercanas.
- Recuerda que cuenta con el apoyo de seres queridos y personal capacitado.
Las personas mayores son más propensas a la sensación de pérdida, ya sea por el deterioro de las capacidades físicas, la jubilación, el aislamiento social o el deceso de sus conocidos.
Por eso debemos brindarles nuestra ayuda a través de redes de apoyo familiares, comunitarias y profesionales. En Visiting Angels estamos preparados para ofrecer acompañamiento a los adultos mayores durante el proceso de duelo, respetando siempre su espacio y autonomía. Nuestros caregivers crean un entorno tranquilo y seguro en donde puedan sentirse comprendidos para sobreponerse a la pérdida con mayor facilidad.
En Visiting Angels nuestro objetivo va más allá de un servicio de cuidado especializado. Queremos crear una red de apoyo para toda nuestra comunidad (nosotros como empresa, tú como familia, ellos como adultos mayores y nuestros caregivers) promoviendo en todo momento la autonomía para que tu ser querido siga participando en la transformación de la sociedad.
Estamos muy cerca de ti en diferentes ubicaciones en la CDMX, Área Metropolitana, Cuernavaca, Zapopan y en Puebla.
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